En el dia 29 de dicho mes, y año, vino otro Lobo de noche, igualmente rabioso, temible y feroz, y seria como á las once de la noche y anduvo toda ella por las heras causando varios y lamentables estragos; mordiendo á muchos, que estavan dormidos en sus heras con cuya funesta y melancolica novedad, se dio providencia para que se tocasse la Campana maior, y las Gentes dispertassen y tomassen las providencias mas convenientes, y oportunas para defenderse, y aplicarse a tomar las armas para matarlo; verdaderamente que parecia este Lugar un noche de juicio, todo lamentos, sollozos, lagrimas, alboroto, confusion, y espanto: no se pudo pegar con el en quatro horas, que lo siguieron; vajaba de las heras del Calvario, á las vajas; de estas marchava a las alttas, y en todas mordiendo: duró esta fatalidad hasta las quatro de la mañana, y no se pudo matar; marchó, y no se supo mas de el. De esta segunda invassion murieron: Francisco Orós mayor, Pedro de Rocha, y un Niño de hedad como de seis años hijo de Francisco La Rayad, tambien mordió a Pedro Lapuente con quien Dios nuestro Señor hizo el Milagro por intercesion de Santa Quiteria de libertarlo del Contagio; y en explicacion de su gratitud ofrecio consagrar cultos anuales a la Santa que lo hizo muchos años.